Los objetivos y los presupuestos para redes sociales son dos aspectos fundamentales que todo negocio que quiera ganar presencia online debe tener muy en cuenta. Cierto es que se pueden conseguir grandes cosas con muy poco presupuesto hoy en día: ésa es precisamente la clave del éxito del marketing en Internet y, por supuesto, de las estrategias de promoción en redes sociales.
Qué inversión debo reservar para Social Media
Los límites los pone la imaginación y… que no se engañe nadie: los objetivos. Macarse unos objetivos muy ambiciosos con unos presupuestos para redes sociales muy cerrados es casi como meterse en la boca del lobo voluntariamente. Hay que tener muy claro que, cuando se leen casos de éxito, se suele estar ante proyectos cuyo presupuesto tiende a estar a años luz de las posibilidades reales que puede asumir una pyme o cualquier cliente relativamente pequeño.
Lo que a Coca-Cola le funciona con 4 euros, a un cliente pequeño le costará mínimo el doble. ¿Por qué? Porque las grandes marcas juegan con otros elementos que van mucho más allá de esa pequeña y concreta campaña low cost que han decidido llevar a cabo. Coca-Cola ya ha invertido antes mucho, muchísimo más para conseguir una posición de salida más favorable.
Con esto, lo que tratamos de decir es que, antes de nada, uno tiene que saber cuál es su punto de partida y, desde ahí, avanzar. No hay que dejar de ser ambiciosos en los proyectos que decidamos llevar a cabo, pero sí tenemos que ser coherentes y consecuentes con los objetivos y el presupuesto que tenemos. Los éxitos no se miden comparándonos con la competencia, sino comparándonos con cómo estábamos al principio.
Cómo ajustar bien objetivos y presupuesto en redes sociales:
- Analizar las debilidades de nuestro negocio y sus puntos fuertes, así como los del sector, nos ayudará a distribuir con más eficiencia el presupuesto allí donde más lo necesitemos. Quizás Facebook no sea la red que más resultados ofrece para una empresa de nuestro sector y debamos invertir el doble en alguna red vertical especializada…
- Conocer las redes sociales a nuestro alcance, cómo funcionan y qué coste de tiempo y esfuerzo suponen. Por ejemplo, una estrategia basada en Twitter supondrá una persona con dedicación casi exclusiva, ya que esta red exige mucha atención, mientras que Facebook es más fácil de llevar, al igual que Pinterest.
- Tener claro con qué recursos contamos. Si tenemos a alguien en la empresa que dispone de tiempo y tiene buenas capacidades comunicativas, de redacción y atención al cliente, podemos afrontar una estrategia en redes contratando solo los servicios de un Social Media Strategist, que será el que nos diseñará toda la estrategia y el que guiará a esa persona para que pueda desarrollarla con éxito. Si carecemos de ella, tendremos que plantearnos, además, contratar los servicios de un Community Manager, aunque sea por horas.
- Medir todo lo que hagamos. Una de las ventajas de Internet es que podemos probar estrategias y acciones y comprobar prácticamente al momento qué resultado dan. Eso nos permitirá modificar aquellas que no estén dando el resultado esperado o bien prescindir de ellas y centrar los esfuerzos en aquellas que si cubren las expectativas. Monitorizar es clave y, si uno carece del conocimiento suficiente, puede contratar este servicio en a una agencia especializada en redes sociales, marketing online y analítica.
Un abrazo,
ZinKfo, Agencia de Marketing de Contenidos 3.0
www.zinkfo.com
www.facebook.com/ZinKfo
twitter.com/ZinKfo
ZinKfo, Agencia de Marketing de Contenidos 3.0
www.zinkfo.com
www.facebook.com/ZinKfo
twitter.com/ZinKfo